La isla es tan idílica, que el New York Post no pudo evitar destacarla en sus páginas.
“Venden enorme e inmaculada isla al fin del mundo por 35 millones de dólares”. Se trata de un trozo del archipiélago de las Guaitecas, cerca de Coyhaique, que sobrepasa las 4450 hectáreas de superficie. Esto es la mitad del tamaño de la isla de Hong Kong o siete veces el de la isla de Manhattan en Nueva York. De hecho, en su interior hay nada menos que 3 lagos y 80 lagunas.
“El recinto tiene 163 kilómetros de playas, con grandes bosques nativos de coihues, ñirres, lengas y mañíos, además de ser una reserva de 1.130 millones de metros cúbicos de agua dulce”, describe la publicación de los corredores de propiedades “premium” a nivel mundial, Hall & Hall.
“Mientras que las islas no suelen ser para todos, encontrar una de este tamaño, con tal cantidad de playas, agua dulce, naturaleza virgen y privacidad es muy raro. Y dado que nadie la ha tocado, es una gran oportunidad para construir en ella”, señaló el corredor Jeff Buerger al NYP.
“Aquí la naturaleza ha permanecido intacta desde hace miles de años”, añade.
La publicación especifica que, para llegar a ella, el mejor camino es arribar a Chile al aeropuerto de Santiago, para tomar desde ahí un vuelo a Balmaceda, y desde ahí realizar el viaje en bote o helicóptero.
“A medida que parece que el mundo se encoge, y las oportunidades de expansión para trabajar en propiedades de clase mundial están aumentando, nos sentimos emocionados, privilegiados y humildes al presentar la Isla Virgen. Es una rara oportunidad el presentar esta propiedad sin precedentes al mercado global”, describe la publicación comercial.
“Suele ser un cliché en el mercado inmobiliario, pero esta propiedad realmente merece decir que se trata de una oportunidad de una vez en la vida”, concluye.